El FC Ballkani demuestra por qué nos gusta la Conference League

Se ha convertido en el primer equipo de Kosovo en acceder a una fase de grupos en las competiciones UEFA y ha sido capaz de ganar al Sivasspor en Turquía 

En los tiempos actuales del fútbol, en los que nos quieren vender que sin la Superliga todo se va a desmoronar y va a desaparecer este deporte tal y como lo conocemos, a uno se le hacen chiribitas en los ojos ante las gestas de los pequeños clubes. No me refiero a que el Eintracht gane la Europa League o a que el Tottenham alcance la final de la Champions, que también tienen un mérito terrible. La referencia se dirige hacia el infra fútbol, hacia los modestos de verdad. Porque sin esa base, el fútbol sí que nunca hubiera llegado a lo que es hoy en día. Y eso hay que agradecerlo y tenerlo siempre presente.

La Conference League es el reducto en el que los conjuntos europeos más humildes pueden sacar la cabeza. Un torneo al que algunos miran por encima del hombro con desdén, como si allí participaran los parias del concierto futbolístico continental. Sin embargo, es una gran oportunidad para seguir creciendo. Pueden dar fe el Bodo Glimt noruego, que se plantó en los cuartos de la pasada edición, en la que un equipo de Gibraltar compitió en la fase de grupos: el Lincoln Red Imps. Este año se encuentran dejando su sello el FC Vaduz de Liechtenstein, el Zalgiris Vilnius de Lituania… o el FC Ballkani de Kosovo.

El FC Ballkani demuestra por qué nos gusta la Conference League
El Ballkani celebra su victoria frente al Sivasspor en Turquía FOTO: CONFERENCE LEAGUE

Nos vamos a detener en este último. Se trata de la primera vez que un conjunto kosovar alcanza una fase de grupos de una competición UEFA. Y lo ha hecho a lo grande, cantando victoria en Turquía frente al Sivasspor en un encuentro loco. Le empataron en el 91’ y Ermal Krasniqi entró en la historia del Ballkani con su gol en el 94’ para firmar el definitivo 3-4. Hoy recibe al Slavia Praga a partir de las 21.00 horas para intentar seguir con vida en el grupo, en el que marcha último con 4 puntos. Los mismos que los checos, con 7 figuran el Cluj rumano y el Sivasspor.

La del Ballkani es una historia de modestia hasta para el fútbol de su país. No en vano consiguió su primer entorchado en la Superliga de Kosovo en la temporada 2021-22 y se encuentra viviendo su debut en los torneos europeos. Como campeón doméstico, accedió a la primera previa de Champions, pero cedió con el Zalgiris en la prórroga y salió rebotado a la Conference. Aquí ha tenido que superar tres eliminatorias para alcanzar la ronda grupal, yendo por la ruta de los campeones para evitar a otras escuadras de mayor pedigrí porque su coeficiente es de los más bajos de la competición. Los dirigidos por Ilir Daja pasaron por encima de La Fiorita (San Marino) con un global de 10-0, batieron al KI Klasvík (Islas Feroe) por penaltis y en los playoff se impusieron al Shkupi (Macedonia del Norte).

El Ballkani se ubica en la ciudad de Suva Reka, de unos 11.000 habitantes, y fue fundado en 1947, un año después de la creación de la Federación de Fútbol de Kosovo. Siempre se integró dentro del engranaje del fútbol yugoslavo, pero sin alcanzar nunca la élite. De hecho, el único equipo kosovar que tuvo cierta continuidad fue el Prishtina en la década de los 80. Kosovo, cuya gran parte de la población es de origen albanés, posee una corta vida como país. La guerra hizo estragos a finales de siglo y no logró la independencia definitiva de Serbia hasta 2008. Aunque a día de hoy la sigue sin reconocer.

El FC Ballkani demuestra por qué nos gusta la Conference League
El Ballkani juega sus citas europeas en el Fadil Vokrri de Prishtina

Como tampoco hace España. Solo hay que recordar los malabares empleados en RTVE para evitar pronunciar el nombre de Kosovo durante los encuentros que les enfrentó a España en el marco de la clasificación para el Mundial de Qatar. El combinado era nombrado como “territorio de Kosovo” o “equipo de la Federación de Fútbol de Kosovo”.

FIFA no dejó competir a Kosovo a nivel internacional por esa falta de reconocimiento. Su selección no pudo empezar a jugar encuentros amistosos hasta 2014, pero sin acceder aún a las competiciones oficiales. Eso llegaría a partir de mayo de 2016, cuando fue admitida tanto por la UEFA como por la FIFA y logró disputar la clasificatoria para el Mundial de 2018. Quedó última en su grupo con 1 punto en 10 choques. Eso sí, su crecimiento fue enorme. Kosovo fue tercera en las preliminares para la Eurocopa de 2020, por detrás de Inglaterra República Checa. Incluso derrotó a los checos en Prishtina. Vedat Muriqi, delantero del Mallorca, es probablemente su figura más reconocida y el mítico Alain Giresse, campeón de Europa con Francia en 1984, es el seleccionador del combinado balcánico.

UEFA no abrió las puertas a que los clubes kosovares entrasen a sus torneos hasta la temporada 2017-18, por lo que no extraña que el Ballkani haya sido el primero en disputar una ronda de grupos. El escaparate de la Conference permite al conjunto de Suva Reka, y a otros muchos, pasear su nombre fuera de sus fronteras. Y eso se traduce en progreso. Para ellos mismos y también para el resto del fútbol.

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